Podemos definir la salud como ese estado de equilibrio entre las capacidades defensivas, resilientes y reparadoras del organismo y los retos que enfrentan nuestro cuerpo y mente.
Es una pena que nuestra sociedad no favorezca la autogestión de la salud. Los padres no siempre somos el mejor ejemplo, la escuela desatiende profundamente aspectos tan básicos como la gestión de las emociones, la alimentación o el uso correcto de nuestro cuerpo. Durante la salud nadie nos guía y durante la enfermedad el médico no suele tener tiempo ni recursos para ayudar a su paciente a tomar las riendas de su estado. Las autoridades sanitarias emiten recomendaciones generales pensadas para hacer un bien a la mayoría y no resultar dañinas a casi nadie pero eso no es lo mismo que una recomendación óptima y personalizada en cada caso individual.
En el blog de Instinto de Nido encontraréis artículos que os ayudarán a conocer la mejor manera de cuidar de su propio cuerpo y mente y a asumir esa responsabilidad como algo natural.